Vital colorido matutino

Miércoles, 11 de enero de 2006

¡Buenos días!

Ya anoche, cuando salía del cine, así como esta mañanita cuando paseaba camino de la oficina, se respiraba un aire sereno, sin apenas frío ni calor, ya sabéis, en torno a 0ºC; y la serena vitalidad que me envolvía no era acompañada por el color, debido a la pertinaz niebla que me impedía ver tanto la noche como el despertar del día.

Solo veo grises neblinosos a la espera de que, como ayer, el sol derrita la neblina que aún queda y podamos ver el escueto colorido invernal dominado por los cárdenos de las ramas de los árboles, ateridas de frío, como el colorido invernal. El caso es que a mí, las dos mantas que esta mañana me abrigan, la neblinosa y la de la nada rosada rosada, si que me hacen sentir cómodo ... será mi ardoroso vitalismo matutino.

Anoche, en el cine, estuve viendo la película "Vida y color", de Santiago Tabernero, y con la guapísima Silvia Abascal entre muchos otros actores y actrices, la mayoría adolescentes. Historia de unos personajes, adolescentes y jóvenes en su mayoría, en un barrio urbano marginal en la España del otoño de 1975, ya casi legendario momento de bisagra histórica nacional, ese en el que transmutamos de grises (los de color y los que daban palos) al variopinto color.

El chaval protagonista tenía 14 años entonces, como yo mismo y supongo que el guionista y director del film, lo que me trajo montones de recuerdos de mi vida adolescente, empezando por el título, que se refiere a una colección de cromos que yo también hice entonces, como tantos coetáneos míos. Muy buena película, extraña a veces por algunas de sus alegorías y metáforas visuales. Insisto, muy buena película, con la que disfruté en bastantes momentos, no solo por los gratos recuerdos infantiles que me evocó.

Pues para ampliar aún más si cabe nuestra amplia paleta de colores de vida, nada como un poquito de sabiduría ajena:

- "Sin orden no hay obediencia a las leyes, y sin obediencia a las leyes no hay libertad, porque la verdadera libertad consiste en ser esclavo de la ley".  (Jaime Balmes).

 - "En un gobierno bien instituido, las leyes se ordenan según el bien público, no según la ambición de unos pocos".  (Nicolás Maquiavelo).

 - "Debemos trabajar con todas nuestras fuerzas, pero cuidándonos al mismo tiempo de no perder la libertad de espíritu. Porque nuestras acciones deben ser, ante todo, la expresión de nuestra libertad; de lo contrario pareceremos ruedas que giran porque una causa externa les obliga a ello".  (Rabindranath Tagore).

 - "La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el silencio".  (Cicerón).

 - "Cada fase de la naturaleza tiene su voz y su lenguaje, que hace pensar y sentir de forma distinta, inspira una idea, despierta un recuerdo, arranca una sonrisa o una lágrima, según llegue a un corazón dichoso o a un alma dolorida".  (Concepción Arenal).

Besos y abrazos,

Don.
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