Jueves, 16 de febrero de 2006
¡Buenos días!
El sol supongo que ya habrá vuelto a nacer un día más a la vera del Arlanzón, pero no lo veo debido a la espesa capa de plomizas nubes que no cesan de exudar en toda la mañana lluvia fina y caladera, a ratos casi aguanieve, acompañada de un desazonante ventarrón de poniente. Hace mucho frío. Con todas estas inclemencias se me han escondido, abrigadas en sus aposentos, todas mis deliciosas y deseables hadas y ninfas ribereñas, diosas de mi fantástico gineceo mañanero. Tal vez anden sobrevolando por encima de las nubes, libres de las alteraciones climáticas, asoleándose cerca de la estratosfera. Mi voluble imaginación ya revolotea tras ellas, como siempre.
Ayer por la tarde estuve en el cine viendo "Memorias de una geisha" ("Memoirs of a geisha"), de Rob Marshall, y con Zhang Ziyi. Como en la película glosada ayer, no esperaba gran cosa de ésta, pero en esta ocasión sí que se cumplieron mis expectativas. Película regularcilla, rutinaria, convencional, que solo tuvo algunos bellos y buenos momentos, la mayor parte de los cuales fueron admirar a mi bienamada y hermosísima Zhang Ziyi, uno de mis amores platónicos desde que la descubrí en su primer film, maravilloso film, "El camino a casa", como todos los de su director, Zhang Yimou. El caso es que salvo en las escenas finales, en las que Zhang Ziyi volvió a aparecer adorable, ella no estaba tan bella como de costumbre, quizás por la caracterización de japonesa, pues ella es china.
El que me entusiasmen las películas orientales (chinas, japonesas, coreanas, ...) no quiere decir que las que tratan temas orientales me gusten, especialmente si tienen tan poca enjundia como esta película gringa. Este Rob Marshall había dirigido anteriormente una película que en general me pareció deplorable y que arrasó en los Óscar de aquel año, el musical "Chicago" ... ¡no entiendo a estos gringos! ... ni a lo que suele conocerse como "gran público", pues estos dos films de Rob Marshall han recaudado muchísimo en taquilla.
Pues ahí van otras pocas citas que espero que incluyáis en vuestras memorias de sabiduría ajena:
- "Si bien me quieres, Juan, tus obras me lo dirán". (refrán).
- "Vino y mujeres, más sinsabores que placeres". (refrán).
- "Los afectos se diferencian unos de otros mientras que el odio es uno solo". (refrán).
- "Protegedme de la sabiduría que no llora, de la filosofía que no ríe y de la grandeza que no se inclina ante los niños". (Khalil Gibran).
Besos y abrazos,
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