20140702

Belicoso matutino

Jueves, 28 de febrero de 2002

¡Buenos días!

Hoy parece como si el sol hubiese reñido con la luna y se niega a aparecer ante nuestros ojos como suele, radiante y luminoso, y se empecina en esconderse tras un manto de grises nubes. El caso es que, sin embargo, aunque la temperatura sigue bajando poco a poco, como Eolo parece que nos ha dado tregua, la sensación térmica no es desagradable.

Y yo, un tipo pacífico en general, al que no le gustan las guerras, absolutamente, ni las pelis de ese género, en general, me fui ayer tarde a ver al cine, "Black Hawk: derribado", de Ridley Scott, un director que ha hecho de las mejores pelis que he visto en mi vida, y creo que la que más me ha gustado jamás, "Blade Runner". Fui a verla por él, pues rara es la peli bélica que me entusiasma. Que recuerde, y a modo de ejemplo, "Senderos de gloria" de Stanley Kubrick, "Johny cogió su fusil" de Dalton Trumbo, y la candidata bosnia de este año al Óscar a la mejor extranjera, "En tierra de nadie".

Me gustaron mucho la banda sonora, de Hans Zimmer (me encantan sus bandas sonoras), y también me encantaron muchas de las imágenes, muy plásticas y bellas (algunas incluso a pesar del horror que retratan). La historia destila un típico tufillo épico-patriotero que no es de mi agrado, muy propio del género cinematográfico bélico (hay honrosísimas excepciones), aunque levemente atemperado por cierto espíritu crítico (esto si de mi agrado), aunque no pudo hacer de desodorante con el tufillo. Aún así tuvo buenos momentos.

Y las frases de sabiduría ajena para hoy son:

 - "Un golpe no es ni será jamás sino un daño físico que un hombre puede ocasionarle a otro, sin probar por ello sino que es más fuerte o más ágil, o que el otro no estaba prevenido"  (Séneca).

Demoledora sabiduría estoica encierran estas palabras, que valen tanto para un roto como para un descosido, es decir, léase tanto guerras como violencia doméstica, o lo que se os ocurra.

 - "Todos estos humores, sectas, juicios opiniones, leyes y costumbres nos enseñan a juzgar sanamente los nuestros y educan al propio juicio a reconocer su imperfección y flaqueza natural: lo cual no es un aprendizaje despreciable"  (Montaigne).

Besos y abrazos,

Don.
_____

No hay comentarios:

Publicar un comentario