Caramelos matutinos

Martes, 16 de mayo de 2006

¡Buenos días!

Otro día de caramelo primaveral, con sol radiante, placidez extrema, agradabilísimas y reconfortantes temperaturas, y pluscuamperfecto clima en general ... y, ¿a quien le amarga un dulce? ... carpe diem.

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo un caramelo de película, no precisamente por su dulzura, aunque sí la de la joven actriz protagonista, uno de los rostros más perfectamente hermosos que haya visto jamás, digno merecedor de ser una de mis ideales ninfas ribereñas, casi parecía un diseño de ordenador, perfectamente simétrico, de esos en los que se coge media cara y se duplica la otra media como en un espejo.

Se trató de "Hard candy", de David Slade, y con Patrick Wilson y Ellen Page (rostro angelical donde los haya). La película fue impecable, sorprendente, inquietante, en definitiva, fabulosa y fantástica. Me entusiasmó. La fotografía, igualmente impecable, en la que en la primera mitad abundaban los primerísimos planos de los prácticamente dos únicos protagonistas ... hay tres personajes más, pero no aparecen más de dos minutos cada uno.

Historia de dos personajes, un duelo psicológico entre ambos, al estilo de la magistral "La huella", año 1972, de Joseph L. Mankiewicz, que empieza enganchando desde el arranque, de un modo sensual y seductor, para irse convirtiendo en terror psicológico, con algunos toques de humor para relajar algo la enorme tensión. Me pareció una especie de versión apócrifa y pervertida del cuento de Caperucita Roja.

La historia es original, con algún giro argumental, y fantástica, a la par que muy real por lo que denuncia, pues es un duro alegato contra ... no os lo digo para que os sorprendáis desde el arranque, aunque enseguida lo cazaréis. Ganó premios en el Festival de Sundance, y en el pasado Festival de Cine Fantástico de Sitges, donde casi arrasó, ganando los premios de mejor película, guión, premio del público y de la crítica.

En definitiva, película imprescindible, os la recomiendo encarecidamente, aunque para ciertas escenas es preciso que los tengáis bien puestos, pues se os pondrán de corbata, chicos, ... bueno, creo que no, que se os quedarán como garbancitos o menos. En realidad no se ve nada, todo estará en vuestra imaginación, que es terror psicológico. ¡Ah, chicas!, que no me olvido de vosotras, que también sufriréis, pero algo menos que nosotros, al carecer de gónadas masculinas que os puedan atragantar o que se os puedan acojonar. Por cierto, para terminar, insisto, ¡acojonante película! ... y nunca mejor dicho.

Bueno, ahora unos caramelos de sabiduría ajena, que el cerebro necesita como combustible físico-químico el azúcar (glucosa de caramelo o de lo que sea), y como combustible anímico la sabiduría:

 - "En la venganza, el más débil es siempre el más feroz".  (Honoré de Balzac).

 - "Si no queréis temer nada, pensad que todas las cosas son de temer".  (Séneca).

 - "La buena suerte libra a muchos del castigo, pero a nadie le libra del miedo".  (Séneca).

 - "El verdadero mal para el hombre no es el que sufre, sino el que hace".  (Alessandro Manzoni).

Besos y abrazos,

Don.
_____