Jueves, 6 de febrero de 2003
¡Buenos días!
Ya casi ni me acuerdo de los
recientes días pasados de invierno, invierno, aunque todavía sigue nubladillo
por la vera del Arlanzón, para recordarnos en que clima estamos. Pero ahora,
debido a unas pocas lluvias y al deshielo, y gracias al calorcito, en relación
al clima de pasados días, andan los ríos como desbocados, especialmente el
Ebro, que ha casi inundado Miranda de Ebro, y corriente abajo anda anegando
riberas allá por donde discurre.
Antes de ayer estuve en el
cine, ¡sí!, antes de ayer, pues debido a un lapso de memoria ayer no acudí a mi
cita matutina, casi siempre provocada por las tormentas cerebrales que me
suelen producir la gran mayoría de películas que suelo ver.
El film que vi fue "Un
hombre sin pasado", de Aki Kaurismaki, película finlandesa que
ganó el gran premio del jurado, así como el de interpretación femenina del
pasado festival de Cannes. En esta película también nos habla de desheredados,
en este caso del primer mundo, del primerísimo, pues Finlandia es uno de los
países en los que mejor se vive del mundo, o al menos eso dicen la mayoría de
ratios estadísticos de bienestar.
Nos cuenta la historia de un
hombre que pierde la memoria por una paliza que recibe, y que acaba con una
especie de tribu de "pordioseros". Nos habla de miseria social, de
amistad, de amor, y de muchas otras cosas, y todo con una estética muy
peculiar, parsimoniosa, con mucha, muchísima sorna, y una demoledora crítica
social. De hecho, me reí muchas veces. Por tanto, a pesar de que tiene un
aspecto como de minorías, os recomendaría que la fueseis a verla, pues es muy
buena.
Y las frases de sabiduría
ajena para hoy, empiezo con una con la que me uno al grito de los cineastas
españoles de "¡no a la guerra!":
- "En nuestra patria y en nuestros
tiempos no merece el honroso nombre de estadista el hombre que en todos sus
planes de administración no incluya dar prioritariamente, a todos sus
ciudadanos, la mejor educación posible".
(Horace Mann).
E información, añadiría yo,
además de la muy necesaria formación. Y continúo con otras frases
reivindicativas:
- "No se empezará a escribir la verdadera
historia hasta que los hombres crean más en lo que ven que en lo que
oyen". (Emile Chartier Alain).
- "El hombre libre es aquel que no teme
ir hasta el final de su pensamiento".
(León Blum).
- "Los discursos dulces adormecen la
conciencia y profundizan nuestra ignorancia, e ignorancia significa
estancamiento y retroceso". (Helena
Roerich).
Gran verdad esta, ... y
entonces, ¿por qué se escandalizan de que unos cómicos pongan en solfa la
actitud de ciertos gobiernos, como el nuestro, ante la guerra? Suscribo
plenamente la frase del premiado actor Luis Tosar en los cinematográficos
galardones Goya de este año, que dice más o menos: "Si los líderes
mundiales quieren petróleo, ... que se vayan a Galicia a cogerlo del 'Prestige'
hundido, en lugar de a Irak" ..... pues eso, mucho prestigio se está
hundiendo con esto de la absurda y colonial guerra.
Y tras estos reivindicativos
razonamientos, me despido, besos y abrazos,
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