Jueves, 23 de enero de 2003
¡Buenos días!
Anda el clima haciéndome
guiños seductores a modo de breves momentos de radiantes claros, intercalados
con confortables nubes de algodón. Han pasado los días de oscuras lloviznas,
más propias del otoño que del invierno. Aunque tampoco es muy propio este
clima, más cálido y reconfortante, aunque tan solo haga 5ºC ... paradojas de la
climatología, la terráquea y la interior.
Y claramente me seduce la
idea de ir escribiendo a salto de mata, conforme se me va insinuando la
inspiración, estos matutinos, que espero os seduzca tanto el leerlos como a mí
el escribirlos.
Ayer estuve en el cine
viendo "Oscura seducción", de Jez Butterworth, y
con Nicole Kidman y Ben Chaplin. Producción británico-australiana que me sedujo
con meridiana claridad (la Kidman, por supuesto), gracias a la trama, con un
par o tres inesperados giros (al menos para mí, tan inocente ayer, como el
protagonista). Me agradó sobremanera esta película.
Y como frases de sabiduría
ajena, una macedonia de ellas:
- "La prudencia es el miedo caminando de
puntillas". (M. Zamacois).
- "De casa en que anochece tarde, Dios
nos guarde" (refrán).
- "Quien comiendo es callado, no pierde
bocado". (refrán).
- "La tontería y la vanidad son
compañeras inseparables". (Beaumarchais).
- "La belleza de una mujer fatua es como
una sortija de oro en el hocico de un cerdo". (Salomón).
- "Palabra echada, mal puede ser
retornada". (refrán).
- "Por tus palabras habrás de ser
justificado, y por tus palabras habrás de ser condenado". (Jesucristo).
Besos y abrazos,
Don.
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