Viernes, 19 de abril de 2002
¡Buenos días!
¿Claustrofóbico? ... quita,
quita, quita, seamos positivos, si con el día que hace hoy apetece retozar en
la ribera del Arlanzón y sentirse agorafílico. Gracias al radiante día de hoy,
con su diáfana luz, por fin puedo apreciar que la naturaleza, ¡esta vez sí!, ha
decidido que ya es primavera, pues diviso desde aquí los primeros brotes verdes
en la más remolona flora ribereña. Además, la temperatura es perfecta, sumada a
la quieta placidez del ambiente.
Ayer volví al cine, y vi
"La habitación del pánico" de David Fincher, y
con Jodie Foster y Forest Whitaker. Buena película en la que se pasa un rato
agradable, si por agradable entendéis tensión cinematográfica con algo de
claustrofobia. Yo disfruté un rato, variando mis sensaciones, de la placidez de
pasadas películas a la tensión de ésta. Sin embargo no me gustó tanto como
otras dos buenísimas pelis de este director, con las que disfruté más, pasando
miedo y sorprendiéndome del toque inteligente de ambas, "Seven", y
"El club de la lucha".
Y para terminar, dos frases
ajenas que nada tienen que ver con el tema de hoy, y ambas bastante distintas,
aunque del mismo tema:
- "La infancia es una eterna promesa que
nadie mantiene" (Kate Douglas).
- "A mí, esto de llegar a hombre me
planteó serios problemas. Vamos a ver: de pantalón largo, ¿se puede dar patadas
a los cubos de la basura?, ¿se puede andar a pedradas con los chicos de otro
barrio?" (Camilo José Cela).
Besos y abrazos,
Don.
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