20140606

Apasionado matutino

Jueves, 5 de septiembre de 2002

¡Buenos días!

El viento norteño de pasados días, como tercer vértice de un clásico triángulo amoroso, ha roto la pasional relación que mantenían las nubes y el sol, en la que éstas envolvían celosamente a su astro rey, impidiendo que nos iluminase a los demás y caldease el ambiente. Demos gracias a Eolo, que nos ha permitido que el sol nos caliente, sin la nubosa exclusividad, en estos fresquetes días de fin de verano. Ya tendrán las nubes oportunidad en el otoño que se avecina de arroparnos a su antojo y lavarnos la cara de legañas mañaneras con sus llantos otoñales, aunque menos apasionados que los tormentosos veraniegos.

Pues ayer fui al cine a ver una película hispano-argentina, "Apasionados" de Juan José Jusid, y con Natalia Verbeke, Pablo Echarri, Nancy Duplaá y Héctor Alterio. No me apasionó nada, nada, y me pareció una convencional y amable comedieta sentimental sobre una muchacha obsesionada con quedarse embarazada, que se convierte en el tercer elemento de un triángulo amoroso. Para mi gusto, la peli está tocada con demasiado meloso ternurismo (y eso que mi segundo apellido es Melero que significa, entre otras cosas, que come miel, aunque no me guste mucho), y es demasiado parecida a las hollywoodienses pelis de masivo consumo. Tan solo tuvo algunos muy breves gratificantes momentos. Por tanto, solo la recomendaría a todos aquellos que busquen pasar un buen rato sin complicaciones ni sofisticaciones.

Y como sabias frases ajenas para hoy tenemos:

 - "Presta dinero a tu enemigo y lo ganarás a él, préstalo a tu amigo y lo perderás"  (Benjamín Franklin).

En el caso de la peli de hoy, "presta a tu novio, o su semen y ..."

 - "Los amigos se convierten con frecuencia en ladrones de nuestro tiempo"  (Platón).

 - "Retira la amistad a la persona que, si te ve en el riesgo, te abandona"  (Samaniego).

 - "Cuando uno tiene motivos de quejarse de un amigo, conviene separarse de él gradualmente, y desatar, más bien que romper, los lazos de la amistad"  (Catón).

 - "No necesito amigos que cambian cuando yo cambio y asienten cuando yo asiento. Mi sombra lo hace mucho mejor"  (Plutarco).

Besos y abrazos,

Don.
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