Profundas ambiciones matutinas

Miércoles, 20 de febrero de 2008

¡Buenos días!

Tengo hondas ambiciones primaverales, y aunque la temperatura es dulce, lo suficiente como para percibir yo clarividencias de floración por mis adentros, el resto del clima desentona algo, que hace un ratito se ha puesto a llover y el día está muy gris, como en un pozo sin fondo en el que no se ven atisbos de yemas y retoños que nos indiquen el despertar de la hibernación ... pero todo es ilusión, que la primavera ya está cerca ...

Ayer por la tarde estuve en el cine viendo una muy buena película, con momentos, bastantes, realmente excepcionales. Se trató de "Pozos de ambición" ("There will be blood"), de Paul Thomas Anderson, y con Daniel Day Lewis y Paul Dano. Basada en una novela titulada "Oil" ("Petróleo"), nos relata la ascensión de un obsesivo minero que acaba de magnate del petróleo, desde los albores del s.XX hasta la Gran Depresión del 29, Daniel Plainview, cuyo apropiado apellido podría traducirse como clarividente.

Nos cuenta una historia de fanatismo capitalista, de capitalismo salvaje, y de fanatismo religioso, y de todo lo que ambos se llevan por delante; lo que viene a ser lo mismo, que el liberalismo capitalista está llamado a ser la religión del futuro, arrinconando a las demás. También trata de las relaciones entre ambos, capitalismo y religión, y de avaricia, de falsos e ingenuos iluminados y de falsos y clarividentes conversos (hipocresía, al fin y al cabo), de familia, y de como se utiliza a ésta, vendiéndola, para los fines propios. Una epopeya de éxito personal, tan del gusto de los gringos, aunque algo negra como el petróleo, pues el éxito es a costa de lo que sea, sangre incluida; y también de todos los advenedizos que tratan de parasitarlo, iglesias varias incluidas.

De este director había visto sus anteriores films salvo los dos primeros (quiero ver "Boogie nights"), entre las cuales me destaca por su maestría "Magnolia", que os recomiendo encarecidamente (ved su matutino más abajo). Siempre ha sido un director relativamente arriesgado en temas y formatos, aunque la que vi ayer tiene un corte mucho más clásico, aunque sin abandonar del todo sus señas de identidad.

Pues como una de mis más profundas ambiciones es el conocimiento y la sabiduría sin fin, os lanzo unas perlitas de sabiduría ajena que confío os den la clarividencia necesaria para salir de casi cualquier pozo en el que eventualmente podáis caer:

 - "La cultura se alcanza leyendo libros; pero el conocimiento del mundo, que es mucho más necesario, solamente se alcanza leyendo a los hombres y estudiando las diversas ediciones que de ellos existen".  (Lord Chesterfield).

 - "Cuando se dice que el dinero no da la felicidad se alude, evidentemente, al de los demás".  (Sacha Guitry).

 - "El dinero no puede hacer que seamos felices, pero es lo único que nos compensa de no serlo".  (Jacinto Benavente).

 - "Quien nació para pobre, no llegará a rico".  (refrán).

 - "Un hombre es rico en función de las cosas que puede desechar".  (H.D. Thoreau).

 - "El esclavo solo tiene un dueño; el ambicioso, tantos como personas que le pueden ser útiles a su fortuna".  (Jean de la Bruyère).

 - "La hipocresía es un homenaje que el vicio hace a la virtud".  (La Rochefoucauld).

 - "Una de las más abyectas formas de la usura es la que se formula en el viejo 'Dios da ciento por uno'. Hay mucha gente piadosa que le lleva al cielo la cuenta nimia de todas las virtudes practicadas, de todos los sacrificios hechos".  (Amado Nervo).

Amén, Amado. Besos y abrazos,

Don.

P.D.: ¡Qué se me olvidaba! ... tres citas más sobre capitalismo, religión y sus interacciones, la primera de las cuales tiene que ver mucho con algo que pasa en el film, hacia el final, y las otras dos con mi ideario personal de religión y globalización total, no solo económica:

 - "¡Ojalá Dios me diera una clara señal! Como hacer un gran depósito a mi nombre en un banco suizo".  (Woody Allen).

 - "Gracias a Dios, todavía soy ateo".  (Luis Buñuel).

 - "Mi patria es el mundo, y mi religión hacer el bien".  (Thomas Paine).

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Magno matutino de líos

(Miércoles, 26 de septiembre de 2001)

¡Buenos días!

Tras otra racha de días sin asistir a esta maravillosa cita matutino-vespertina, al menos por lo que mí respecta, debido a unos magnos líos laborales, magno y magnífico día "primaveranotoñal" tenemos hoy a la vera del Arlanzón, de esos que enervan los más anodinos humores que podáis tener, y os ponen prestos a disfrutar, a poco que la vida nos ofrezca sus contados, que no escasos bienes. Hoy, por ejemplo, me he quedado un momentito, a la salida del cafetín mañanero, extasiado ante unas jardineras (unas chicas, no macetas) que estaban plantando en los parterres de una calle unas preciosas flores. ¡Pero qué bonitas son las flores, las vegetales y las féminas! Lástima que no fueran magnolias, que despiden uno de los aromas más fragantes que conozco, aunque las féminas si que continúan emanando sus sugerentes perfumes.

Y más magnos líos, pues ayer estuve viendo en video la película "Magnolia". Como es tan larga, algo más de tres horas, la vi troceada en tres capítulos, entre ayer y antes de ayer. Quise haberla visto en el cine en su día, pero se me escapó de la fugaz cartelera burgalesa.

Magnífica película, que en algunas cosas me recordó a dos películas de Lawrence Kasdan, "Grand Canyon" y "Mumford", también soberbias, excelentes y exquisitas. ¿Recordáis la apasionada laudatoria que hice de "Mumford" hace casi dos años en otro de estos matutinos? (vedla más abajo). Pues también os recomiendo encarecidamente que veais "Magnolia" ... y las otras dos. Cogedlas en video.

Bueno, pues como siempre últimamente, para acabar, ahí os lanzo otra andanada de frases ajenas:

 - "Cuando nos encontramos en peligro no nos damos cuenta, porque somos poco reflexivos; gracias a esto no perdemos la calma y salimos bien de todo".  (André Maurois).

 - "La vida enseña que no se es feliz sino al precio de alguna ignorancia".  (Anatole France).

 - "A pesar de que no se le da mucha importancia, la melancolía habría que tratarla como una enfermedad lo antes posible para que no se convierta en una tristeza que perturbe la mente del melancólico".  (Florence Nightingale).

Pues tomo nota de cara al inminente otoño climático, que se nos echará encima a poco que nos despistemos, puesto que el pasado otoño ya estuve muy melancólico en mis matutinos (aunque nada enfermizo, creo, solo fue pura retórica literaria ... o no solo pura retórica ... ???).

 - "Hombres y mujeres, mil pesares, mil placeres".  (refrán).

Sabio refrán, diría yo. Besos y abrazos,

Don.

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Matutino tardío y crónica cinéfila

(Jueves, 28 de octubre de 1999)

¡Muy buenos días!

A pesar de lo gris (ya no sé el número de días que llevo sin ver el sol, aunque los árboles están preciosos y no sopla el pertinaz nortecillo que te desazona el alma y el cuerpo), y del leve resfriadillo que estoy padeciendo.

El motivo, en muy gran parte, de este optimismo vital que me corroe, a pesar de algunos pequeños inconvenientes, es la sobresaliente, maravillosa, deliciosa, ... (no sigo, pues el resfriadillo ha agotado mi capacidad memorística de epítetos) película que ví ayer : "Mumford", de Lawrence Kasdan. Estuve durante toda la película sintiendo unas agradables cosquillas en todas mis neuronas, lo que denota que no solo me llegó al corazón, sino también al intelecto (como diría Pedro Erquicia cada vez que despide su programa "Documentos TV", en TV2: -"Una película para espectadores como ustedes"). Es más, me costó dormirme pues estuve relamiendome el delicioso regustillo que me dejó la película.

A modo de historia cinéfila, os diré que, entre otras sobresalientes películas de este director, destacaría: "Fuego en el cuerpo" (impresionante Katheleen Turner, física y artísticamente hablando), "El turista accidental" y "Grand Canyon" (esta es bastante parecida en ciertos aspectos a "Mumford"). Además ha sido guionista de la primera saga de "La guerra de las galaxias" y de alguna película de "Indiana Jones". Su cine como director es absolutamente antagónico a esos guiones "alimenticios" (expresión con la que el actor español Jose Luis López Vázquez expresa esas películas que no le son de su agrado y en las que intervino porque ¡de algo hay que comer!).

En definitiva, qué os recomiendo muy vivamente que veais la película, a pesar de que mi arrebatado laudatorio de ella os pueda llevar a decepcionaros un poco (lo creo poco probable, pero puede ser, pues para gustos, el arco iris, con toda su paleta de colores), ante las expectativas que os pueda generar. Bueno, sin nada más que contar, me despido hasta la próxima, besos y abrazos,

Don.

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