Vespertino maderero

Miércoles, 30 de abril de 2003

¡Buenas, buenísimas tardes!

Salvo por las rachas de helador viento norteño al estilo burgalés, que enfrían algo el ambiente, y el espíritu, hace una radiante tarde de primavera, con algún que otro retazo de blanquísimo algodón nuboso. Pero a pesar de todo, esta vez agradezco grandemente los airados soplos de frescor espabilante, pues estoy como acartonado, como un tarugo de madera (realmente parezco un "tarugo" pues mis neuronas andan abobadas), y todo debido a los agobios de estos tres días, los más duros hasta ahora de este período electoral, que me han convertido en casi un insensible trozo de madera.

Pero estoy vivo, y aún como madera, siento, aunque poco, pero suficiente, y este solecito, al calor de la cristalera del despacho, cual invernadero, me voy sintiendo poco a poco rebrotar, como el olmo de Machado, y espero que mañana, con el día de fiesta, termine por reconvertir mi maderero estado por otro más peludo y juguetón.

Pues ayer estuve en el cine viendo "El lápiz del carpintero", de Antón Reixa, basado en la novela homónima de Manuel Rivas, y con Tristán Ulloa, Luis Tosar y María Adánez. Buena película que se desarrolla en la Galicia de la guerra y posguerra civiles españolas y que nos cuenta una bonita historia de amor, ... bueno tres historias de amor, dos de las cuales están sublimadas por la introversión, ... real como la vida misma. Y lo que más me gustó, como me ocurrió al leer el Quijote de Cervantes, fueron las historias que se cuentan dentro de la propia historia.

Y como frases de sabiduría ajena para hoy tenemos:

 - "Abrigo en mí la convicción de que cuando el hombre se encuentra a solas, cara a cara consigo mismo, suele juzgarse con severidad, reconociendo sus propias faltas, aunque luego se arredre de reconocerlas ante los demás".  (Miguel de Unamuno).

 - "Los hombres pueden dividirse en tres clases: los que creen ser donjuanes; los que creen haberlo sido; y los que creen haberlo podido ser, pero no quisieron".  (José Ortega y Gasset).

 - "En una bandada de blancas palomas, un cuervo negro añade un toque de belleza como no lo haría el candor de un cisne".  (Giovanni Boccaccio).

 - "Seguimos esperando hasta que desesperamos".  (Remy de Gourmant).

Pues sin más esperas, besos y abrazos,

Don.

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