Jueves, 10 de octubre de
2002
¡Buenos días!
Veo señales en el firmamento
de que va a continuar lloviendo ... (¡hay nubes como ayer!) ... creo que me voy
a convertir en el nuevo gurú meteorológico ... y sigo recibiendo señales ...
hace viento y un fresquete incordiante ... (¡las hojas de los árboles se menean
sin mesura!, y la gente pasea por la vera del Arlanzón arrebujada en sus
chaquetones) ... insisto, no sé si crear una nueva religión o ratificarme en
mis creencias empírico-teórico-científico-meteorológicas ... no sé ... dudas
razonables ... la bendita, luminosa y lúcida duda razonable ...
Y como no podía ser de otro
modo (por el título y el algo sarcástico y cínico comienzo de este matutino),
ayer estuve en el cine viendo "Señales"
("Signs") de M. Night Shyamalan, el director de origen hindú de
"El sexto sentido", y con Mel Gibson y Joaquin Phoenix. Buena e
interesante película sobre fenómenos "para anormales", ... perdón,
paranormales, ¿en qué estaría pensando yo?
Y aunque este tipo de pelis
no me suelen gustar, dado que a pesar de eso me gustó muchísimo "El sexto
sentido", y de que sabía que hablaba de algo más que eso, fui a verla. Y
no me decepcionó, pues efectivamente nos habla de fe, de si las cosas suceden
por azar o no, de modo parecido al tema de la peli que os glosé ayer.
En la película el personaje
principal dice que hay dos tipos de gente, los que ven señales de que las cosas
suceden por algún motivo (enfocado por el lado más bien esotérico-religioso) y
los que creen que suceden por azar. Y yo, como creo que también así se
posiciona la peli, no estoy en ninguno de esos categóricos extremos, pues no soy
nada maniqueo y creo en espacios multidimensionales, nada de restrictivas posiciones
bidimensionales que aplanan (en dos dimensiones) nuestras mentes e impiden que
se expandan más allá (¿a quien quieres más, a papá o a mamá?, ¿estás conmigo o
contra mi?, ...). Y dadas todas esas multifacetas es infinitesimalmente
probable que me encuentre cerca de ningún extremo, como de cualquier otro punto
multidimensional. Todo depende.
Y tras esta perorata
filosófico-matemática, paso a las frases lapidarias para hoy:
- "Los que se enamoran de la práctica sin
la teoría son como los pilotos sin timón ni brújula, que nunca podrán saber a
dónde van" (Leonardo da Vinci).
- "La sapiencia solamente es perjudicial
cuando está mezclada con el orgullo. Si está unida a la humildad predispone el
ánimo a amar mucho más profundamente al género humano" (Silvio Pellico).
- "La variedad es la madre del
placer" (Disraeli).
Besos y abrazos,
Don.
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